lunes, 11 de julio de 2016

Era tan guapa que no sabía si miraba 
o sembraba flores.

Supongo,
que fue por eso que decidí colocarle un marco 
y colgarla en la pared sobre la cama.
Para tener la sensación de estar durmiendo en un jardín.

Le gustaba escuchar música en francés,
el pan caliente por la mañana
y me acostumbró a tomar leche de soja;
decía que tenía que empezar a comer bien
y sano.

Me preparaba ensaladas que luego comía conmigo.
Eso era lo que más me gustaba de las ensaladas.

Amaba andar en bicicleta
y yo me moría de celos cuando lo hacía.
-nunca quedaré tan bien- pensaba,
luego me cogía la mano y me hacía andar junto a ella.

Yo he tenido que irme lejos por un tiempo.
Duermo en una habitación donde no se descansa por los vecinos,
pero pongo música en francés,
tomo un café con leche de soja
y me preparo una ensalada para cenar.

Me he comprado una bufanda nueva
que me pienso poner para andar en bicicleta.
No creo que quede tan bien de todas formas.

Ha pasado un tiempo ya,
pero no me preocupo,
después de vivir tantos inviernos
no todas las ciudades me dan frío.